Hipondría

 

La hipocondría entra dentro de los trastornos somatoformos, ¿Qué significa esto?. Podemos empezar que la palabra somatoformo viene del griego; soma (cuerpo) y morfo (forma).

 

Las personas que padecen este trastorno por más que se hacen exámenes y pruebas médicas no se encuentra ninguna dolencia física, ni ninguna explicación de la dolencia que experimenta el paciente.

 

Para poder diagnosticar este trastorno, tenemos que descartar como primera premisa que no sea una dolencia real y que todo aquello afecte a su vida personal, familiar y laboral. Este trastorno puede aparecer a cualquier edad, pero es raro que aparezca a partir de los 50 años, es posible que se cronifique y puede ir acompañado de otros trastornos como puede ser la ansiedad o depresión. Los comienzos suelen ser producidos por haber pasado enfermedades en primera persona o de otra persona u otros acontecimientos que produzcan un gran estrés (la muerte de una persona muy cercana y querida).

 

Los hipocondriacos son unos expertos en buscar la causa, transcurso y desenlace de la dolencia que tienen por internet, buscan y rebuscan entre las páginas hasta que encuentran lo que quieren leer, es decir lo que les interesa. Se quedan tranquilos durante un tiempo hasta que les vuelve a asaltar nuevas dudas. También suelen ir de una consulta médica a otra, quedándose temporalmente tranquilos, hasta que piensan que el diagnostico ha sido erróneo y vuelven a visitar a otro médico, por lo que viven en una angustia permanente de padecer una enfermedad grave (entre ellas, el cáncer, infarto de miocardio…)

 

Estas personas tienen una hipervigilancia de cualquier pequeña dolencia o cambio que tienen en su cuerpo, que interpretan como malignas; dolores de cabeza, de estomago, ritmo cardiaco…

 

Todo esto se va retroalimentando y van saliendo nuevas dolencias lo que les hace estar más atentos a su cuerpo y así aumenta su ansiedad, lo que les hace tener una calidad de vida mala.

 

Diego de la Fuente

Psicólogo